7 de octubre de 2014

Errante

Los pasos del anciano viajero se detienen en silencio,
la eternidad del alma descansa sobre su pescuezo,
la claridad del misterio hace de sus labios secos,
un sendero sin regreso,
el tiempo relativo como el viento aclara el cielo para salir de este potrero.
la luna romántica palpita sobre su pecho,
siendo esta quien calma las ansias de bañarlo en la ignorancia.

"Oh tenue luz en la oscuridad encaminas mis sueños tan vilmente a las arpas de la cotidianidad,
solo espero no volverme a cruzar por esta cruel ciudad".
El viajero conoce esos besos,
son la esencia viva de vuestros desvelos.

El arco iris se levanta y la lluvia ya descansa entre los brazos del sol.
Viejo caminante, perdido personaje,
hábil trashumante,
es hora de volver a caminar,
es hora de volver a volar sin buscar atrás,
es hora de cantar tu libertad.


Arlecchino

No hay comentarios: